Misericordia Justicia Repetición

Allahhutallah ha querido que el Corán se abra con la Sura AL FATIHAT y también que las criaturas lo adoren solamente a El. “Solamente a Ti adoramos y solo de Ti imploramos ayuda”, dice ALFATIHAT.

El siervo de Allah Le dice a Allah: “Tu eres el Señor de los mundos y Tú eres el Soberano en el Día del Juicio Final”; el siervo también le pide a su Señor “Guíanos por el Sendero Recto, el Sendero de aquellos que Tú has agraciado y no el sendero de aquellos que han incurrido en tu ira”. De modo que el siervo reconoce que Allah es misericordioso, mas que ello, misericordiosísimo, con una misericordia inmensa, incomprensible para el hombre, porque es una misericordia que viene del Señor y que no puede ser comparada con ninguna misericordia que surja del entendimiento humano.
Esa misericordia, según han dicho los hombres sabios, hace que todo exista, que los mundos no se acaben, que el hombre sea creado y destruido permanentemente, sin cesar; esa misericordia hace que los astros giren, que los mares se levanten cuando hay luna llena, que haya brisas para llevar por esos mares a los barcos, que cada enfermedad baje a la tierra con su remedio y… que cada alma no sea cargada con un peso mayor al que pueda soportar.
Esa Misericordia también asegura al hombre que podrá retornar su alma complacida y complaciente y que su corazón es el asiento de la verdadera fe.
Sigue el siervo dirigiéndose a su señor:”Tú eres el Señor de los mundos”. ¿Qué mundos?
Dicen los hombres sabios que hay 17000 universos. ¿Qué significan 17000 universos?
Posiblemente el número 17000 indique una inmensidad, una cantidad de universos inconcebibles.
Cada uno de esos universos son en sí mismos completos, perfectos, algunos son visibles y otros son invisibles, dicen los hombres que saben. De manera que el hombre que se vanagloria de saber mucho, si reflexionara sobre un universo formado por infinidad de mundos, nada menos que 17000, podría darse cuenta de su verdadera limitación.
Cada uno de esos universos está regido por un Qutub o Polo y cada uno de esos universos es un Insan Al Kamil,; hay por lo tanto 17000 Insan Al Kamil que a su vez forman uno solo.
Lo único que se pretende es que el hombre sepa, se dé cuenta, que su imaginación, su raciocinio, no pueden abarcar la inmensidad de Allah hutallah.
Continuando con la Sura Al Fatihat, dicen las criaturas:”Tu eres Soberano del Día del Juicio”.
¿Hay un juicio, qué juicio? Si hay un juicio, hay justicia, ¿qué justicia? ¿La justicia de ésta época, la de hace 100 años, la de la época de los Profetas, mi justicia, la de vds?
Cada Profeta (que la bendición del Señor esté con todos ellos sin faltar ninguno) trajo una justicia que no se contradecía con la justicia de su antecesor, sino que era una forma nueva de aludir a la misma justicia ,pero con las palabras del pueblo y de la época en la que habían llegado.
Todos los Profetas hablaron de un Dios Único y todos los Profetas hablaron de una ley para los hombres que vivieron en esa época y debían de actuar conforme a ella.
Les fueron comunicando a los hombres aquellos actos que estaban prohibidos, aquellos actos dudosos y aquellos que eran agradables a los ojos del Señor Único. Así fue en la época de la Torah, así fue en la época de los Evangelios , así fue en la época del Corán al Karim y así fue en la época de Zoroastro.
Así fue en todas las épocas, los hombres fueron juzgados de acuerdo al cumplimiento o al incumplimiento de esa justicia, que es la única que podemos entender, una justicia clara, inequívoca, para seres ignorantes como nosotros, que nos indica aquello que podemos y aquello que no podemos hacer.
Dijo el Profeta Muhammad (paz y bend), con respecto al accionar del hombre y a la fe que el hombre puso en esa justicia y que se encuentra encerrada en su corazón, pero que se manifiesta en sus actos, que de acuerdo a eso le serán anotados al hombre sus actos, en el Día del Juicio Final.
En ese día, todas las humanidades serán juzgadas y allí el Único Soberano será Allah, el Señor de los Mundos, el Soberano en el Día del Juicio Final.
No importará en absoluto que el hombre haya creído o no haya creído en el Día del Juicio.
Habrá hombres y mujeres que irán al Juicio habiendo negado toda su vida que hay un Juicio.
Habrá hombres y mujeres que irán, sabiendo que hay un Juicio.
En definitiva, poco importa, las creencias de los hombres valen muy poco en la hora de la verdad.
Podríamos decir que el valor de las creencias de los hombres en la hora de la verdad es cero.
Dice la criatura humana en AL FATIHAT: ”Guíanos por el camino recto” SIRATTA AL-MUSTAQUIM.
Es una avenida ancha, recta, un camino sin dobleces. Algunos lo transitan en zig-zag, otros darán vueltas en él, como perros que se quieren morder la cola, otros irán para atrás, en vez de ir para adelante, otros irán por fuera del camino. Cada una de las almas que vaya por ese camino hará cosas diferentes.
Ese camino exige una forma de transitarlo, ese camino encierra un secreto, el secreto es la TARIKA, un camino también, pero estrecho, por donde transitan las almas, de la misma manera que en el sendero ancho.
En el Siratta Al-Mustaquim, serán guiados por Allah, porque así se lo han pedido, y Allah no puede agraciar a nadie sin ponerlo en un camino hacia delante.
El Islam, que es la última religión de esta humanidad, provee a los que transitan el camino recto, de una serie de bendiciones que no son advertidas por la mayoría de los que van por el camino recto.
El Islam es una religión de repetición, por que la repetición es la única manera que tiene el ser humano distraído de acertar alguna vez con la verdad.
En el Islam, todos los días, rezamos 5 veces, inshallah, todos los días 5 veces, posiblemente repitamos AL FATIHAT unas 50 veces por día. Cincuenta veces, son las veces que le dijo Allah a su profeta Muhammad, que su comunidad tendría que rezar, por día. Por consejo de Hazret Musa, el profeta dijo que no lo iban a poder cumplir. Pero, me parece que lo hemos terminando haciendo, de otra manera. ¿Porque será que hay que repetir tanto?
Un ser tan ignominiosamente ignorante, como es el ser humano, ignominia que ya estaba prevista cuando los ángeles le advirtieron a su señor que iba crear un ser que iba a sembrar la destrucción sobre la tierra(ahí primó la misericordia de Allah, que lo creó igual), un ser que el Corán al Karim llamó violento e inconsciente, que solamente el mal viene de él, este ser que recibe mas castigos que premios en su estado de ignominia.
Esta religión sabia, hermosa, le obliga a repetir todos los días lo mismo. Quizás alguna vez, tal vez, posiblemente, en un día, en una hora determinada, hagamos un salat como una oración establecida y sea aceptada por el Señor.
Eso ya justificaría la repetición a lo largo de los años, pero es tal la ignominia del hombre que se queja de tener que hacer cinco oraciones diarias con una cantidad de 50 FATIHATs. Nos quejamos y muchos de nosotros, no la hacemos porque es muy pesado, Inshallah, Marshallah, Astagfirullah.
Entonces vienen los que no son musulmanes y nos dicen: ustedes tienen una religión muy difícil de practicar; vds. Rezan mucho, mientras que nosotros rezamos cuando queremos. Podemos rezar 5000 veces en un día, si nos da la gana, o ninguna; si a eso le agregamos no tomar alcohol, no comer carne de cerdo, hacer el ramadán, dar dinero, hacer el hajj….es muy pesado’’’ “Ustedes los musulmanes son muy difíciles, yo me quedo con mi religión, que es más fácil; o mejor todavía, mi religión es no tener religión…
El tema de las creencias realmente no tiene mayor peso específico. Esas personas también van a ser sometidas al Juicio Final, aunque su religión haya sido no tener religión.
Una vez, tal vez, no es seguro, el Señor de los Mundos les acepte un Salat, only one, ó vds. creen que acepta todos los que le dan por día, ¿porqué creen que existe la repetición?, que hay que repetir, repetir y repetir, bueno los que jugaron con la arquería zen, saben que tienen que tirar muchas flechas para que una dé en el blanco. Hay que rezar muchos salats para que uno de ellos dé en el blanco. Eso forma parte del Siratta al-Mustaquim y eso forma parte de la Tarika. En esto de repetir, hay algo muy importante, que una misma cosa puede ser dicha mil veces y no ser entendida 999; una vez, quizá, tal vez, pero no es seguro, se entienda, y cuando algo es entendido en esta Tarika, camino recto estrecho, o en el Siratta al-mustaquim, camino amplio y recto, eso que es comprendido tiene que aplicarse a uno mismo. Cuando uno escucha y escucha y hace salat y hace salat y no se aplica a uno mismo lo que surge de eso, es que no se ha entendido nada.
Decía el Prof. Muhammad (Paz y dend), que la Fe es algo que está en el pecho de los hombres pero que tiene que ser demostrado por actos, porque eso de escuchar, escuchar y no aplicarse nada en actos , es como si no escuchara.
En esta Tarika, o camino recto y estrecho, el secreto final es que éste camino en realidad no existe, ni ha existido ni existirá, porque no hay ningún camino, porque no hay que llegar a ninguna parte, porque nadie salió de donde estaba, porque es imposible salir de donde uno está. Y si no es posible salir, ¿a donde vamos a volver, si no salimos?. Lo que sucede es que una de las cosas mas difíciles para el hombre, en esta Tariqa, es que se de cuenta que nunca se fue de al lado de su Señor, por el simple hecho que su Señor está mas cerca de él que su vena yugular (cosa que repetimos pero no aplicamos). Si el Señor está más cerca de mí que mi vena yugular, yo no me puedo separar nunca de mi Señor,; si no me puedo separar del Señor es que nunca me fui, y si no me fui, ¿como voy a volver? Este camino, Tariqa, consiste en convencernos de ello. Es condenadamente difícil, convencernos. En esto consiste este trabajo. Es un trabajo de repetición y convencimiento; repetir y repetir para que se convenzan…que no se convencen y hay que convencerlos y vuelven a no convencerse. Actúan como si estuvieran separados y están unidos; actúan como si se hubiesen ido y no se han ido nunca; actúan como si desconociesen al Señor y están con El. ,es decir, una idiotez, una idiotez absoluta, propia de un ser violento e inconsciente..y dormido, como dicen los sufis.
Otra de las cosas muy difíciles de captar es que para darse cuenta que nunca nos fuimos, no hay que hacer nada y cuanto más hagamos, más nos confundiremos; esto es como tratar de tomar un ómnibus para llegar a casa, estando yo en ella. Lo único que podría llegar a hacer, es tomar un ómnibus que me dé la vuelta por toda la ciudad y me lleve de nuevo a mi casa.
Es muy difícil de creer, pero es lo que hacemos, porque creemos que para volver, hay que tomar muchos ómnibus, dar muchas vueltas, pero si Allah está más cerca de mí que mi yugular…..reflexionen’’’.
Podemos decir que este enorme esfuerzo de reunirnos, este enorme esfuerzo de equivocarnos, de no aplicarnos nada a nosotros mismos, de no entender nada, esta forma de actuar con un egoísmo supremo…todo para convencernos de que estamos con Dios. Convencernos de que estamos con Dios, con un Dios musulmán, judío, todo esto es basura.
Yo estoy tratando de convencerme a mi mismo, si vds. se convencen siguiéndome, por ahí hacemos un trabajo en conjunto y si no se convencen es cosa de vds. Pero para convencerlos, se necesita toda ésta parafernalia, porque es tanto el barullo que tenemos adentro –de creer que no estamos junto a Dios, de creer que no hay Dios, cuando es Dios que nos permite decir que no hay Dios, o decir que Dios no existe, gracias a Dios-.Es una paradoja inmensa trabajar duro, para convencerlos de lo que ya son. En algún lado debe haber una trampa, ¿no? Alguien me trampeo, entonces se necesita la parafernalia de un dergha, ¿que significa esto? Significa el convencerlos que tengan paciencia, que se soporten –no que se quieran-(primero hay que soportarse, después vendrá el amor, ), si llega a la conclusión absoluta que hay un Dios único.
Todos aquellos hombres que llegaron a esta conclusión, fueron enemigos de la inteligencia de su época.
Hazret Musa le costó una barbaridad el convencer al Faraón, que había un solo Dios, y no lo convenció.
La inteligencia del Faraón eran sus magos y no los convenció. La inteligencia que operaba en la época del Profeta Muhammad eran los Quraish, que eran tipos muy inteligentes, muy afilados en sus concepciones y no los pudo convencer a muchos de ellos y se murieron los Quraish. La inteligencia del Sanhedrin cuando Jesús fue y les habló tampoco se inclinó ante él y créanme eran tipos muy inteligentes, más que los idiotas que hoy niegan a Dios que no tienen fundamento filosófico. Hoy esos idiotas creen en la idioteces más soberanas que ustedes puedan imaginar, creen en filosofías modernas que se van anulando unas a otras a medida que van apareciendo otros filósofos más agudos de año en año. Ahí existe una palabra que es como una palabra tabú: Dios. “ No, no me diga Dios, no me menciones a Dios, me pongo loco, hábleme de los poderes del hombre, hábleme de ejercicios secretos, hábleme de las posibilidades inmensas del hombre”. Bien, cuanto trabajo para convencer a los que creen en Dios que nunca nos fuimos de su lado, por lo tanto no tenemos que retornar, que hay un censor secreto dentro nuestro que anota todo, llámenlo conciencia profunda, inconsciente, subconsciente, llámenlo como quieran porque llamarlo Dios podría ser un poco peligroso.
Después cuando llegue el último día de un hombre sobre la tierra, vaya usted donde se está muriendo, escuchen lo que dice, algunos han alardeado durante años y años de sus posiciones filosóficas de Dios, y después serías capaces de convertirse al diablo por tener cinco minutos de respiración libre. Dicen los hombres sabios que en el Juicio del Día Final, cuando todas las almas estén reunidas, sin faltar ninguna, y cuando el hombre sea testigo de sí mismo sin ninguna posibilidad de evasión y cuando todo lo que estaba enterrado en su conciencia profunda, surja como corchos y no le pueda pedir cuentas a nadie, ni a su padre ni a su madre, ni a su novio ni su amante, ni a su perro, dicen los hombre sabios que se va a aparecer Dios en toda su grandeza y que aquellos que han creído en un perro o no han creído en nada, se van a refugiar en un perro o en nada, ya que esas fueron sus creencias.
Si yo viera en un perro cuando veo al Señor en toda su magnificencia, en todo su esplendor e inconcebilidad , me voy a refugiar en el perro, yo creí siempre en el perro, me refugio en el perro y si no creí en nada va a ser medio difícil, me pondré un cartelito que diga nada, y me pondré atrás del cartelito y luego cuando Dios en su inmensa misericordia vea eso, se va a esconder para no perturbar a esas pobres criaturas; luego cada alma irá donde deba ir, que será su propio paraíso o su propio infierno y no se imaginen el infierno con todos esos diablitos que los pinchan en calderos, eso es una pavada al lado de lo que realmente es el infierno; no se crean que son torturas físicas porque el físico ya se pudrió, se lo comieron los gusanos, aunque haya revivido de nuevo.
Primero cuando ustedes vienen hay que convencerlos de que hay que soportarse, que sean buenos, que quieran a papá y mamá, que quieran a los maridos y a las esposas, que no sientan envidia ni resquemores, que no se angustien, que no tengan temores, que no sean hipócritas… y todo eso para convencerlos de lo que ya son… extraño trabajo!
Por qué todo esto en definitiva? Porque somos seres humanos que fuimos expulsados y luego retornados al paraíso y eso ustedes parece que se lo olvidan; parece ser que en este ciclo de retorno, nuestro padre Adán se intoxicó con el aire de Ceylán y esto lo llevó a vomitar el fruto prohibido, aunque parece que le quedó un pedacito de veneno que nos enturbió el corazón y esto nos produce confusiones .
Esa manchita que le impide al corazón o al ojo interior ver que no nos fuimos, que fuimos perdonados que no hay ningún camino porque que camino pueda haber si ya estamos en el lugar que debemos estar.
Esto da lugar a las Tarikas, a los Sheiks, a las disciplinas, a esta inmensa parafernalia llamado sufismo, judaísmo o todos los ismos que ustedes puedan imaginarse.
Por alguna razón que solo Dios sabe, el amor es lo único que nos va a convencer que nunca nos fuimos.
De una forma misteriosa y extraña parece ser que debemos probar el dulce vino del amor después del agrio vinagre del destierro porque parece ser por alguna razón que sólo Dios sabe, el hombre aprende con el dolor y el amor es dolor y sin dolor no hay amor y según los hombres sabios se tiene que experimentar la amargura del alejamiento de alguien que nunca se alejó para probar la dulzura de la cercanía cuando siempre estamos junto a Dios, y ese inmenso engaño, ilusión o fantasía es la condición del hombre; por eso el hombre está dormido.
Dijo el Profeta Muhammad (Paz y Bend) : “Mueran antes de morir” porque actualmente están dormidos y cuando mueran se van a despertar, pero nuevamente que muerte y que despertar… qué es morirse y qué es despertar? Realmente existe tal cosa?
Le dijo un pez despierto a un pez dormido: “Si tú me preguntas por el agua mientras nadas, estás loco.”
Si tú me preguntas por Dios mientras Dios está más cerca de ti que tu propia yugular querido, estás chiflado.
El pez despierto le dijo al pez dormido si discutes la existencia del agua mientras te zambulles en ella, mereces ser pescado frito y comido.
Queridos hijos míos, si ustedes discuten a Dios mientras nadan en Dios, merecen morirse como perros, y no es una maldición simplemente la aseveración de un hecho .
Que otra cosa merece un pez que nada alegremente mientras el sol penetra en el agua, nada y nada con su familia, con el cardumen, van de acá para allá chochos de la vida, mientras dice que el agua no existe ese pez merece ser pescado por un pez más grande aunque éste también diga que el agua no existe.
Extraña condición la del hombre que niega lo que es y es capaz de dejarse matar por negar lo que es, increíble, hace una fuerza terrible por negar, lo discute, puede pelearse: usted está diciendo una barbaridad, a ver muéstreme a Dios, porque la física cuántica dice… porque la filosofía de… dice… porque los últimos adelantos de la ciencia dicen que… esas son las burbujitas del pez.
Dijo el Profeta Muhammad (paz y bend) que el hombre más inteligente es aquel que mejor entiende a Dios y que el hombre más idiota es aquel que menos entiende a Dios; o sea que la inteligencia del hombre se mide por su comprensión de Dios . Porque se necesita una poderosísima inteligencia para comprender la existencia de un Dios Único.
Tanto el infierno y el paraíso son a medida de las personas, como los trajes. Si una persona no ha creído en nada va a recibir los terrores de la nada y no hay peor cosa para alguien que siempre estuvo agarrado a las formas que la nada, créanme. Si la persona creyó en nada el infierno será nada, el terror del vacío, sin forma, nada de nada.
Si un hombre no creyó ni en el infierno ni en el paraíso, dicen los hombres sabios que ninguna persona deja de creer en algo por más que con la lengua diga lo contrario, que algo dentro de él cree en algo, lo que fuese y que la falta de conciencia que tiene el ser humano hace que le parezca que no cree en nada.
Al Gazzali dijo que está la religión que uno le muestra al mundo, a la sociedad, la que le muestra a sus íntimos que es un poco diferente y la religión que uno se muestra a sí mismo y decimos religión como sistema de ideas.
Significa que cuando uno habla con la gente, tiene conceptos generales, cuando habla con sus íntimos puede variar un poco y cuando uno se acuesta por la noche y sueña, pasan otras cosas.
Los sueños son la exteriorización de lo que no se quiere reconocer. Hay algo adentro que es una máquina de censurar, no lo deja pasar. En esta pequeña masa gris hay un sistema de censura muy eficaz; pasa lo que deja pasar. Ustedes no se crean que dominan la situación, no dominan nada, eso lo sabían muy bien los sufis.
Hay muchas cosas que no conviene que sepamos, por lo tanto son censuradas para que no pasen, porque Dios vela a sus criaturas de sí mismos, para que no se horroricen. Esto ya se sabía hace mil años, ahora los psicoanalistas lo han descubierto.
Hay un censurador porque Dios no quiere que nos horroricemos de nosotros mismos, que odiamos a los que decimos amar, que cuando vamos para allá en realidad nuestro deseo era ir para otro lado, cuando decimos no en realidad era si y al revés.
Todo esto forma un teatro inmenso interior que este trabajo debería develar poco a poco en la medida que ustedes lo soporten, porque nuevamente la sabiduría del Señor impide que cada alma sea cargada con un peso superior al que puede llevar, con lo cual se pone a la vista una inmensa sabiduría que dice que nadie puede comprender aquello que no está preparado para comprender, porque hay comprensiones que si nos llegaran de repente, nos harían añicos.

Asalam Alaikum.

Sohbet pronunciado por Abdul Qader Baba con fecha 23 de Marzo de 2002