Consejos para los Peregrinos

Debes saber que la forma de cualquier tipo de devoción es un medio para encontrar la Verdad. Si no se encuentra la Verdad a través de ella, la forma no tiene significado o propósito por sí misma.

Un hombre vino a despedirse de Hadrat Shibli (PB) y este le preguntó: «¿Adónde vas?»
«Al Hayy»
«Lleva contigo dos bolsas grandes. Llénalas allá de misericordia y tráenoslas, de modo que recibamos una parte de ella para darla a nuestros amigos y ofrecerla a nuestros huéspedes».
El hombre se despidió, y partió al Hayy. Cuando regresó, fue a visitar a Hadrat Shibli, quien le preguntó: «¿Hiciste la peregrinación?».
«Sí».
«¿Qué hiciste primero?».
«Hice una ablución ritual total, me puse mi ropa de peregrino, hice dos ciclos de salat, empecé a recitar la talbiya, y expresé mi intención y decisión de hacer la peregrinación».
«Con tu intención y decisión de realizar la peregrinación, ¿fuiste capaz de cancelar todas las decisiones que habías tomado desde el día en que naciste y que eran contrarias a esta decisión?».
«No».
«Entonces no has hecho tu intención de hacer el Hayy. Dices que te quitaste tus ropas ordinarias y te pusiste tu traje de peregrino. ¿Te desnudaste a ti mismo de todo lo que habías hecho en tu vida ordinaria?».
«No».
«Entonces no hiciste la ablución ritual. Cuando recitaste la talbiya y dijiste Heme aquí presente, mi Señor. Aquí estoy, a Tus órdenes. Estoy aquí diligente, no hay nadie como Tú, toda gracia es Tuya, toda bendición proviene de Ti, todo Te pertenece, no hay nadie asociado a Ti´, ¿recibiste una respuesta, un llamado de Allah?". "No". "Entonces no recitaste la talbiya. ¿Visitaste Meca?". "Sí" "Cuando entraste a Meca, ¿sentiste que recibías de Allah un estado diferente?". "No". "Entonces no has estado en Meca. ¿Entraste al Haram, al suelo sagrado?". "Sí". "Cuando entraste al Haram, ¿prometiste dejar atrás todo lo que no está permitido?". "No". "Entonces no entraste al Haram. ¿Entraste en la Mezquita Sagrada?". "Sí". "¿Te sentiste más cerca de Allah en la Mezquita Sagrada?". "No". "Entonces no ingresaste en la Mezquita Sagrada. ¿Has visto la Kaaba?". "Sí". "Al ver la Kaaba, ¿alcanzaste el objetivo por el que fuiste?". "No". "Entonces no has visto la Kaaba. ¿Has circunvalado la "Kaaba, tres veces rápidamente y cuatro veces lentamente?". "Sí". "Al apresurarte tres veces circunvalando la Kaaba, ¿te alejabas presuroso de todo lo que te acompañaba?, y al caminar cuatro veces alrededor de ella, ¿alcanzaste la salvación, la seguridad y el agradecimiento?". "No". "Entonces no has abandonado a tu viejo ser, ni tu carga mundana; ni te has acercado más a tu Señor. No has hecho las circunvalaciones. ¿Tocaste y saludaste a la Piedra Negra?". "Sí". "¡Guay de ti! Se dice que quien toca la Piedra Negra toca la Verdad. El que toca la Verdad está en la paz más segura. ¿Sentiste esa seguridad?". "No". "Entonces no has tocado la Piedra Negra. ¿Hiciste después dos ciclos de salat en la estación de Hadrat Ibrahim?" "Sí". "Al hacerlo, ¿te paraste frente a tu Señor y Le mostraste tu intención?". "No". "Entonces no hiciste tu salat allí. ¿Te paraste sobre el monte Safa?". "Sí". "¿Qué hiciste ahí?". "Recité el takbir, declarando la grandeza de Allah". "Mientras estabas ahí, ¿tu alma encontró la pureza (safa)? ¿Tu corazón encontró la alegría (saada)? Mientras decías Allahu akbar, ¿el mundo y lo mundano se empequeñecieron?". "No". "Entonces no corriste siete veces entre Safa y Marwa. ¿Te paraste en la cumbre del monte Marwa?". "Sí". "Cuando estabas allí, ¿sentiste descender sobre ti la paz y la tranquilidad?". "No". "Entonces tampoco has estado allí. ¿Fuiste a Minà desde Meca?". "Sí". "¿Recibiste lo que anhelabas?". "No". "Entonces no has estado en Minà. ¿Entraste al Masyid Al-Jayf?". "Sí". "Cuando entraste al Masyid Al-Jayf, ¿se refrescó en tu corazón el temor a Allah?". "No". "Entonces no entraste al Masyid Al-Jayf. ¿Subiste al Monte de la Misericordia en la llanura de Arafat?". "Sí". "¿Llegaste a conocer cómo y por qué fuiste creado, y adónde vas a ir? ¿Llegaste a saber quién es tu Señor, ese Señor que tú niegas? ¿Te ha mostrado Allah algún signo de que eres uno de los elegidos?". "No". "Entonces no has estado en Arafat. ¿Has estado en Al-Mashar Al-Haram?". "Sí". "¿Recordaste a Allah en Al-Mashar Al-Haram de tal manera que te olvidaste de todo lo demás? ¿Llegaste a comprender ahí cómo Se dirige a nosotros y cómo son respondidas nuestras oraciones?". "No". "Entonces no has estado en Al-Mashar Al-Haram. ¿Sacrificaste un animal?". "Sí". "Sacrificaste [con él] tus propios deseos y tu voluntad por causa de Allah?". "No". "No has sacrificado nada. ¿Apedreaste a Satanás en Minà?". "Sí". "¿Arrojaste tu ignorancia? ¿Has recibido sabiduría en su lugar?". "No". "No has arrojado piedras a Satanás. ¿Visitaste la Kaaba, la Casa Sagrada, después de descender de Arafat?". "Sí". "¿Qué regalos recibiste del Amo de esa Casa? Porque el Profeta (sws) dijo:Los peregrinos son los huéspedes de Allah´. Lo correcto y esperable es que un anfitrión honre y ofrezca regalos a los huéspedes».
«No he recibido ningún regalo».
«Entonces no has realizado esa visita. ¿Te has saciado bebiendo el agua de Zamzam?».
«Sí».
«El sabor del agua de Zamzam, ¿te hizo jurar que no probarías nunca más nada de lo prohibido?».
«No».
«Entonces no has bebido agua de Zamzam. ¿Hiciste la circunvalación de despedida en la Kaaba?».
«Sí».
«¿Dejaste atrás a todo tu ego y a toda tu existencia?».
«No».
«Entonces no has hecho tu despedida. Ni has hecho tu peregrinación. Si lo deseas, puedes regresar y hacer tu peregrinación otra vez. Si lo haces, hazlo de la manera que te he dicho».

«El Camino de Muhammad – Un Tratado sobre Conducta y Ética Islámicas»
Imam Birgivi – Interpretado por Sheija Tosun Bayrak al-Jerrahi al-Halveti